Gracias a Rachel y Gonzalo pude visitar la que es – probablemente – la ciudad extranjera que más quería visitar en mi vida (gracias Steve Irwin y Animal Planet). Fueron cerca de 11 días intensos, en los que caminé mucho, conocí mucha gente increíble, y lugares tan increíbles como su gente.

Este es un resumen de practicamente solo zonas centrales de Sydney (con excepción del zoo de las primeras fotos y Manly), porque los alrededores quedarán pendientes para mi próxima visita.

También vi unos crocodiles harto más grandes, pero sinceramente no pude hacerles una buena foto.

No solo el centro de Sydney es un espectáculo, basta con que tomes una autopista y te encuentras paísajes increíbles. Es el recorrido que Rachel y Gonza hacen hacia su casa, benditos!

Darling Harbour se transformó instantaneamente en mi lugar preferido del centro de Sydney.

Si hay algo que los chilenos podemos envidiar de Sydney es su tren. Porque hay cosas eficientes y luego está el sistema de trenes de allá

Colega!!

The Rocks es un barrio hermoso, con una arquitectura muy diferente al resto de Sydney, y está muy cerca del Opera, por cierto.

Deporte. por todo Sydney, todo el tiempo 😀

Al fondo, Circular Quay, estación de tren para tomar ferrys a muuuuchos lugares y para ir al Opera House.

El Opera no es solo increíble por fuera, también por dentro.

Colega!!!

Darling Harbour merecía una segunda visita <3

Powerhouse Museum es un INFALTABLE.

En las tardes hay viento, lleva una chamarrita 😉

Recorriendo el jardín botánico (que es inmenso) se da un contraste típico de Sydney: lo natural y lo urbano en su máxima expresión.

Una de mis postales favoritas, amé esos edificios <3

La gracia de esta foto es que se ve: Opera House, Sydney Harbour Bridge y chiquitito en una esquina el Luna Park 😀

La ciudad siempre iluminada, es todo un espectáculo.

Luna Park!!
(probablemente la única decepción de este viaje)

Creo que no hace falta mencionar que Sydney a cada tarde regala atardeceres que te dejan sin respirar, no?

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